A menudo en este blog decimos expresiones como «dormir saludablemente» o incluso «higiene de sueño», porque dormir forma parte de la salud. En este artículo abordamos los principales beneficios del sueño en la infancia y su importancia.
Salud física
¿Sabías que la hormona del crecimiento entra en acción durante las horas de sueño? El descanso es fundamental para su desarrollo y también para la reparación del tejido muscular. Además, la falta de sueño provoca desarreglos en el apetito, por lo que si tu hijo duerme saludablemente eso disminuye factores de riesgo para la diabetes, obesidad, hipertensión y diversas enfermedades del corazón.
Salud cognitiva
Mientras dormimos, no solo descansan nuestros músculos sino también el cerebro. Las ondas cerebrales se ralentizan y el líquido cefalorraquídeo (LCR) se encarga de eliminar desechos tóxicos de nuestra materia gris. ¿Sabías que la carencia de sueño está asociada al desarrollo de enfermedades neurodegenerativas?
Una buena rutina de sueño mejorará la capacidad de alerta y vigilancia de vuestro hijo y contribuirá a optimizar su aprendizaje y memoria, mejorando su rendimiento escolar.
Salud emocional
¿Sabías que, ante la privación de sueño, el cuerpo reacciona del mismo modo que ante el estrés? Los niños que no duermen suficiente suelen estar ansiosos, nerviosos, hiperactivos e irritables, suelen ser más demandantes hacia sus cuidadores e incluso les cuesta jugar solos. Si vuestro peque descansa bien, apreciaréis un estado de ánimo más equilibrado y mejorará su sociabilidad.
Salud inmune
Al dormir, el sistema inmunitario aprovecha para regenerarse aprovechando el descenso en los niveles de cortisol y adrenalina.
Priorizar el descanso saludable de vuestro hijo fortalecerá su sistema inmune, ayudará a combatir las infecciones y contribuirá a una mejor recuperación física y mental si enferma.
En resumen, el descanso saludable es tan importante como comer sanamente. Proteger el sueño en la infancia es clave para criar niños felices y sanos.