Uno de los principales motivos de preocupación para todas las familias es el sueño de sus pequeños. Es importante que tanto niños como bebés duerman las horas necesarias para su descanso y a menudo en este blog defendemos los beneficios de establecer unos hábitos de sueño saludables. Sin embargo, ¿sabemos hasta qué punto contribuye a su correcto desarrollo físico y mental? ¡En este post lo explicamos!
Beneficios de un buen descanso en niños y bebés
Los bebés recién nacidos pueden dormir hasta 16-17 horas al día, cantidad que irá disminuyendo a medida que crezcan. Así, por ejemplo, un niño de entre 3-5 años dormirá de 13 a 15 horas al día, mientras que, entre los 5-12, lo hará unas 10 o 11 horas. Dormir es la actividad más importante que su cerebro realiza en sus primeras etapas de vida.
Durante el sueño, nuestros pequeños consiguen una serie de beneficios, tales como:
- Óptimo estado de salud. Favorece su sistema inmune, así como su crecimiento y desarrollo físico.
- Proporciona energía al cerebro. Ayuda a su memoria, algo esencial para su aprendizaje.
- Favorece el correcto desarrollo emocional y social. Mejora su comportamiento y su relación con los demás.
- Contribuye a mejorar su alimentación. Hacen una óptima selección de alimentos y comen con más ganas.
- Mantiene el equilibrio emocional. Hay estudios que demuestran que los niños que duermen poco o mal tienden a la hiperactividad y a la ansiedad. Por tanto, un correcto descanso aportará tranquilidad y disminuirá su irritabilidad.
- Óptimo estado de alerta para aprender. Contribuye favorablemente a su rendimiento escolar y a su vida cotidiana.
- Favorece su adaptabilidad. Un sueño reparador y en buenas condiciones les permite adaptarse mejor a los cambios, al colegio, los paseos, los horarios, etc.
Como podemos comprobar, el sueño ayuda de muchas y variadas formas al crecimiento y desarrollo de nuestros hijos, de ahí que sea imprescindible que le prestemos especial atención.
1 comentario en «Cómo ayuda el sueño al desarrollo de mi hijo»