Acostar a tu bebé es más que una simple transición a la noche, es un momento clave para asegurar un sueño reconfortante. Los padres pueden sentirse abrumados por las innumerables recomendaciones sobre la hora de dormir, aunque con un poco de creatividad y amor pueden marcar la diferencia.
¿Por qué adoptar rituales nocturnos?
Son muy beneficiosos para la salud emocional y el desarrollo infantil. Una rutina nocturna brinda seguridad, confianza y ayuda en el proceso de relajación y calidad del sueño. Desde apagar las luces hasta el abrazo de buenas noches, cada paso estimula su creatividad y refuerza el vínculo entre estas actividades y dormir.
Estos momentos también son preciosos e importantes para los padres, pues les brindan la oportunidad de conectar y disfrutar juntos.
Disfrutar el proceso con creatividad
Los rituales nocturnos son una oportunidad para impulsar la creatividad. Imagina iniciar la hora de dormir con música tranquila y luces tenues para crear un ambiente relajante. Mirar fotos, escuchar audiocuentos, regalar un masaje, rezar, contar historias, hacer un teatro con peluches o experimentar con diferentes tipos de música puede hacer estos momentos únicos.
Para niños mayores hay diversas posibilidades a la hora de crear un ritual, por ejemplo, si tiene un coche, muñeco o algún juguete preferido, puede ayudar a su coche a entrar al garaje o acostar a su muñeca en una cuna improvisada. Incluso el aseo nocturno puede ser un momento especial al cepillarse los dientes o ponerse el pijama.
Armonizando tiempos y espacios
La flexibilidad a la hora de definir los rituales nocturnos es crucial; hay que adaptarlos a las preferencias de cada familia y del niño. Una vez que tengan vuestra rutina, manténganla para ayudar al niño a reconocer que sucederá antes de dormir y le ayude a relajarse.
Los tiempos dentro de la rutina desde el baño hasta que se le tumbe, puede tomar entre 30 a 35 minutos, incluyendo su cena o último biberón. Así que es importante tener en cuenta la duración que necesitarán previo a la hora de dormir para evitar saltarse un paso o acelerar la rutina, ya que todo esto puede hacer que el sueño de un resultado contrario a lo esperado.
Por otro lado, el lugar o espacio donde se lleve a cabo la rutina también se debe definir y adaptar a la creatividad que deseen, por ejemplo, un rincón de lectura o para escuchar música se pude hacer en el salón o dentro de la habitación, colocar luces tenues y cálidas donde le bañen o den el biberón.
Toque final con diversión
La hora de dormir puede ser divertida, disfrutada, esperada y relajante a la vez. Un detalle como darse un abrazo grupal junto a unas caricias una convierte la ese momento en algo muy especial.
Recuerda, tu alegría y seguridad son fundamentales para que tu bebé se relaje. Disfruta cada momento de esta etapa especial y ¡duerme sonriendo!
#dormirsaludablemente 🙂
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